martes, 26 de junio de 2012

España.... ¿País de fachas?

Observo, miro y veo la cantidad de banderas de nuestro país que hay colgadas en numerosos domicilios, balcones ó ventanas de cualquier ciudad de España. Es un hecho que nadie puede negar. Por poner un ejemplo en la calle donde yo vivo ayer contabilice unas 12 banderas. La característica principal es su color rojo y gualda, pero algunas tienen el escudo, otras se ve el mítico toro de Osborne, otras sin embargo  tienen alguna leyenda escrita.  Entre estas últimas hay una que dice “Orgulloso aficionado de la Roja”, eslogan de una conocida marca de cerveza que ha inundado con su “bandera” la geografía española.
¿A qué se debe?  La respuesta es sencilla: SELECCIÓN ESPAÑOLA DE FÚTBOL, ella tiene la culpa de que media España este inundada con la bandera de nuestro país.
Todo ocurrió cuando en el mes de Junio de hace 4 años la Selección Española empezó a cosechar triunfos con la conquista de la 2ª Copa de Europa de Selecciones. Desde aquel momento se desato la locura, los que no tenían bandera se la compraron y los que la tenían la lucieron con orgullo.
También hay que decir que esto de las banderas ha hecho proliferar un negocio, hasta ahora casi inexistente. Se contaban con las manos las pocas empresas que se dedicaban a la producción, distribución y venta de insignias nacionales, esto ha hecho remacer las megatiendas de “Todo a un euro”, inicialmente regentadas por ciudadanos españoles, pero que hoy por hoy el 98% de las mismas está en manos de los ciudadanos chinos, y aunque la copia de la bandera no sea un fiel reflejo de la original, se vende.
Ahora miremos atrás en el tiempo é imaginemos que hace 10 años nos dicen que 3 de cada 6 hogares españoles iban a colgar la insignia nacional en su casa ¿Qué hubiéramos pensado? Que en España somos muy fachas. Y eso ¿Por qué? Por colocar una bandera de mi país en mí casa.
Actualmente no se les llama fachas ahora son aficionados, aunque se vistan de rojo y gualda y lleven la cara tatuada con el escudo de España, todo hay que decirlo gracias a la Selección los fachas han salido a hondear sus banderas y no les da verguenza. Y una cosa más en los Estados Unidos 9 de cada 10 casas tienen en su jardín un mástil con la bandera estadounidense, y no se les tacha de fachas, sino de patriotas.






viernes, 23 de marzo de 2012

Jet Lag Baby

Agapito es padre de familia con 2 hijos y una mujer encantadora. Sus hijos son de lo mejor, expresa con orgullo a quien le pregunta por ellos, y razones no le faltan, son buenos, educados y atentos a todo lo que se les manda. Pepito y Santi, son esos hijos de los que tanto se enorgullece. Pepito tiene 5 años, es el mayor y Santi, tiene 4. Los dos se llevan muy bien, no discuten, ni tan siquiera se pelean, comparen todas sus cosas y son obedientes. Esto es lo normal en ellos, pero hay un momento en que se transforman en unos seres extraños, ocurre todos años en el mes de Marzo, inexplicablemente, nadie ha dado con la solución al problema. Hay quien piensa que es culpa del Gobierno de este país, otros lo achacan a la globalización, otros al cambio climático, hay quien va más lejos y se inclina que es culpa de la Unión Europea.
Sus padres se lo preguntan una y otra vez ¿Por qué? ¿Por qué mis hijos tienen que pasar por este clavario? Y es que sus hijos sufren lo que los psicólogos llaman el “Jet Lag Baby”, trastorno de sueño por descompensación horaria. Un desequilibrio producido entre el reloj interno de una persona (que marca los periodos de sueño y vigilia) y el nuevo horario. ¿Pero a que es debido? Sus padres no lo entienden, ya que nunca ha viajado en avión a países con distinto uso horario. El Jet Lag Baby, les ocurre en casa, de la noche a la mañana ¿Cómo puede ser?
Después de muchos estudios su médico de cabecera dio con la raíz del problema. Los niños sufren el Jet Lag Baby, por el cambio de horario, que consiste en adelantar los relojes una hora para ajustar nuestro horario local al horario ofical de verano. Algo que tendrá que ocurrir en la madrugada de este sábado 24, cuando a las 2 serán las 3.
Por esto Pepito y Santi, preguntan a su padre ¿Papá porque tenemos que irnos ya a la cama si todavía hace sol? Y es que Agapito manda a sus hijos a las 9 de la tarde/noche, para que descansen y no se duerman al día siguiente, aun sabiendo que en la calle hace sol.
Agapito sufre todos los años este problema, el se las tiene que “apañar” para engañar a sus hijos: bajando las persianas, encendiendo luces… para hacerles creer que ya entró la noche y para que no se enfaden cuando se tienen que ir a la cama.

miércoles, 21 de marzo de 2012

El pupas, la crisis y una conjuntivitis

Emilio y Paco son primos por parte de madre. Emilio adora a su primo, más que a un hermano y a Paco le pasa lo mismo, pero sus vidas son completamente distintas. Emilio trabaja de funcionario en el Ministerio de Educación, está casado, tiene 3 hijos y la vida le ha sonreído desde que nació. No ocurre lo mismo con Paco, es licenciado en Informática, a su edad todavía vive con sus padres, no tiene trabajo y ni siquiera ha salido con ninguna chica, vamos que se podría decir que son la noche y el día.
Paco tiene mucha envida de su primo, aunque no se lo diga personalmente, sabe que le gustaría mucho llevar su vida. En su círculo de amigos le llaman el “pupas”, porque todo lo que toca lo convierte en desgracia, y lo peor de todo es que se lo cree.
Su vida no va más allá de su casa, la oficina del paro y un bar que regenta donde intenta evadirse de sus problemas, eso sí bebiendo “Eau tuyaux”, ó lo que es lo mismo agua del grifo. Lo llama así para hacerse el interesante en el bar y porque también es lo único que aprendió en un curso de francés, que hizo por correspondencia.
Paco piensa que a sus 34 años su vida va seguir siendo la misma y como dice él: “es que la crisis nos hace llevar este estilo de vida, pero yo estoy contento mientras tenga salud”. El pobre no ve más allá.
Todos los días se acerca a la oficina del Servicio Público de Empleo, para ver que ofertas de trabajo hay ó como último recurso que le ofrezcan algún curso de formación. Llega a la Oficina, bastante aseado y limpio, aunque no tenga trabajo le gusta ir impecable, porque dice que en cualquier momento puede aparecer la mujer de su vida y tiene que estar preparado, se acerca al tablón de anuncios y empieza a leer: “Se busca persona con experiencia en manejo de carretillas, buena presencia y don de gentes… interesados llamar al 555-95-95”,  bueno parece que esto no es para mí -comenta-, sigue leyendo: “Se necesita personal con buena presencia, don de gentes y con francés…”, vaya si se me hubiera quedado alguna palabrita mas del curso de francés hubiera solicitado una entrevista -susurra-, sigue leyendo: “Se buscan personas con conocimientos de informática -hombre mira una cosa que es para mí-, comenta, y tengan buena presencia, se valorará curso de informática, diplomatura ó licenciatura, los interesados deben apuntarse en la mesa B de esta oficina”. Ni corto, ni perezoso se acerca al mostrador de información para que le indiquen donde está la mesa B, una agradable señorita le da instrucciones, mire usted, tiene que rellenar este formulario y coger un numerito de la maquina, después espere a que le llamen, gracias -contesta Paco-, entono sensual y es que como decimos ahora la chica le ha hecho “tilín”, coge el numero y espera a que le llamen.
Mientras rellena el formulario, su cabeza está pensando en la chica del mostrador, la verdad es que no está mal, debería lanzarme -piensa para sí-, pero ¿Cómo lo hago?, mientras piensa como “entrar”, a la chica. Paco es ajeno a todo lo que ocurre a su alrededor, están tan metido en ligar con la chica, que se olvida por completo de que tiene que presentar la solicitud para la oferta de trabajo. Después de darle muchas vueltas a la cabeza, Paco se cabrea consigo mismo y piensa –céntrate, y rellena el impreso, lo presentas y luego a ver qué pasa-, la desgracia se ceba con él, ya que el número se le ha pasado. Bueno a coger otro numerito. Paco se levanta coge otro número y se sienta a esperar, mientras tanto va rellenando el impreso –mira podría preguntarla como se rellena el impreso y así intento romper el hielo-, pero estas tonto, como le vas a preguntar cómo se pone el nombre y los apellidos… ¡¡¡es de pardillos!!! –piensa Paco-, el sigue dándole vueltas al asunto. Bueno voy a ver si el impreso es difícil de rellenar, algo tiene que haber que no sepa rellenar, echa un vistazo al documento y ¡sorpresa!, casilla 7-A índice las veces que ha estado en I.T. ¿Y esto de I.T., que es? -se pregunta-, mira aquí tengo algo para abrir una conversación. Ni corto, ni perezoso se dirige hacia el mostrador, tres personas delante de el esperan a ser atendidos. Le toca, mire señorita, esto de I.T. que significa -le pregunta a la chica-, en ese momento sueña el teléfono, la chica amablemente le contesta, espere un momento, por favor.
 Mientras ella habla, la cabeza de Paco no para de trabajar, que la digo ¿Quieres salir conmigo? Joder Paco, que eso ya no se lleva. Venga piensa ¿Podrías hablar del tiempo? Pues creo que no, voy a parecer un panolis. Hablar de trabajo, no creo que sea una buena conversación, me empezará a decir que si trabaja mucho, que si cobra una miseria. A Paco le empieza a  recorrer un sudor frio por todo el cuerpo y empieza ligeramente a palpitar el ojo derecho, pero mira que es difícil ligar -comenta-, si se le cayera algo al suelo podría empezar una conversación, esta opción tampoco es buena, venga Paco que tu puedes, intentando animarse. La chica cuelga el teléfono. Que desea -le pregunta-, esta casilla ¿Qué significa? -le responde Paco-, la chica le mira y al verlo con las palpitaciones y el sudor en la frente, le pregunta ¿le ocurre algo?, Paco, no no, no pasada nada, un ligero mareo. Por favor siéntese al lado de la ventana para que le dé un poco el aire, -genial piensa Paco-, ahora me apartará en un rincón y se acabo todo. El guarda jurado le acompaña a una silla cerca de la ventana, Paco no hace más que pensar en la oportunidad perdida, intenta respirar y se tranquiliza.
A los pocos minutos se acerca la chica con un vado de agua -se encuentra usted mejor-, le pregunta la chica. Paco sorprendido le da las gracias, es usted muy amable é inconscientemente de su boca sale la palabra… y muy guapa. La chica se sonroja, gracias, -le dice- es la primera vez que me lo dicen, es en ese momento cuando Paco empieza a soltarse y a mantener un diálogo fluido con ella, apenas habrán hablado 5 minutos, pero para Paco han sido una eternidad, deseaba que se parara el tiempo. La chica mira su reloj y le comenta, tengo que volver al trabajo, pero si quieres podemos quedar otro día, mira te dejo mi teléfono. Paco asombrado por los hechos, no da crédito, parece que ha ligado y sin esfuerzo, bueno, eso de sin esfuerzo, le ha costado una palpitación y unos sudores, por lo menos no he tenido que invertir un euro en invitarla a cenar, piensa para sí. Paco sale contento de la Oficina de Empleo, olvidándose hasta de presentar la solicitud para el puesto de informática, el solo piensa en esa chica.
Al llegar a casa Paco, no duda en llamar a Eva, así es como se llama nuestra amiga, y en quedar con ella. Quedan para el día siguiente, para tomar un café, aprovechando el descanso de su trabajo. Paco se siente feliz, durante esos minutos que esta con Eva, todos sus problemas se evaporan cuando esta con ella, el tiempo parece que se para y él se siente, después de mucho tiempo, el hombre más feliz de la tierra. Un día de los que acostumbran a quedar Eva le comenta que Paco ha sido seleccionado para el puesto de informático, aunque Paco, por la emoción, no pudo llegar a presentarlo, Eva que vio los impresos en el mostrador y los presento. Paco se sentía muy a gusto y lleno de alegría, estaba con Eva y después de mucho tiempo iba a ir a una entrevista de trabajo. La entrevista fue todo un éxito y Paco por primera vez tenía trabajo. La relación entre Paco y Eva, iba cada día a mas y este decidió dar un paso más é invitarla a cenar, Eva sin pensárselo le contesto con un sí rotundo, quedaron para el viernes, y Paco tenía 2 días para hacer que la noche del viernes fuera especial para los dos. Reservo el mejor restaurante de la ciudad, se compró un elegante traje y con su primer sueldo encargo un ramo de rosas de Madagascar, las flores más exóticas que existen en la tierra.
El viernes por la mañana Paco se levanto para prepararlo todo, pero una gran indisposición tiro por traste toda la intendencia para Eva, había amanecido con un brote de conjuntivitis. Bueno, no pasa nada -comento-, unos lavados con agua y sal y todo arreglado, eso es lo que se creía él, ni con agua, ni con sal, ni na, de na. Que la conjuntivitis no se iba. Decidió ir a su médico de cabecera para que le recetasen algo. El médico se asusto al ver tal infección en los ojos y le mando un reposo absoluto, incluyendo una baja laboral. Ahora que las cosas me van bien, aparece esta jodida conjuntivitis -le comento al médico-. No me podría dar usted algo para que esta noche estuviera mejor -le pregunto-. El doctor asombrado ironizo, se cree usted que soy la Virgen de Lourdes, no hago milagros, solo soy un médico que intento curar a mis pacientes. Paco se marcho entristecido a su casa, por un momento todo se había desmoronado, su chica, su trabajo…. en fin a volver a empezar otra vez -comento indignado-.

jueves, 15 de marzo de 2012

La Limpiadora

Un día cualquiera, en una oficina cualquiera, sobre las 4 de la tarde aparece por la puerta una señora de mediana edad, se llama Lola. Entra empujando un carrito de la limpieza. -Buenas Tardes-, dice en voz alta, algunos de los que trabajan la contestan, otros balbucean y hay otros que ni siquiera la dirigen la palabra. Se la ve contenta y con una ligera sonrisa en la cara. Comienza a su trabajo, tarareando una canción, que apenas se logra entender. Pero enseguida, apenas pasados unos minutos de su entrada, comienza a murmurar sobre su trabajo.
Joróbate, que trabajas en esta empresa y no eres de aquí… y te tratan como una esclava, dice. Unos cuantos la miran y no entienden su malestar, otros la tachan de “loca”,  otros sin embargo comentan que siempre esta así.
La mujer prosigue con su trabajo entre balbuceos y tarareos de canciones. Llega a una pequeña salita donde los trabajadores suelen descansar de su trabajo, aunque hoy han estado celebrando que a uno de los compañeros le han hecho fijo con un ágape, y nada mas entrar Lola se queja: - Joder, con las fiestecitas. No somos chachas de la empresa, somos limpiadoras. Mira todo esparcido por la mesa, se piensan que soy su criada con las fiestecitas. Pues alá toó a la basura, me da igual.
En realidad la mujer lleva razón, tiene que recoger lo que otros han ensuciado, algunos no están de acuerdo, -no es la mujer de la limpieza, pues que limpie, que para eso la pagan-, otros sin embargo discrepan de este comentario -pues deberíamos recoger todo lo que podamos y no ensuciar tanto-, es entonces cuando produce un pequeño debate sobre la limpieza, mientras que Lola continua su tarea.
Parece que se ha serenado un poco y a la vez que limpia entabla un ligero dialogo con varias trabajadoras, pero su tranquilidad se ve enturbiada cuando llega a la mesa de Juan: ¡Que tenemos que tragar con todo, es que hay que joderse. Yo soy la limpiadora, le tenía que dejar las migas sin recoger, no soy ni su madre, ni su chacha! Juan, es un trabajador un poco zarrapastroso, trabaja mucho y apenas tiene tiempo para comer, con lo cual come en su puesto de trabajo, de ahí las criticas, obsesionado con los bichos tiene en su mesa un insecticida, Lola al verle murmura: -Mira, el bote de las moscas al sol, haber si explota-. La verdad es que Lola no parece muy contenta con su trabajo ó tal vez sea con los empleados de la oficina. Mira su reloj: -bueno me queda 1 hora para terminar, a ver si pasa pronto-
Ahora le toca el pasillo central de la oficina, que separa el departamento de facturación con el de atención al cliente, y al verle comenta en voz alta: “Para comerse una pasta se han tenido que recorrer toda la empresa, mira todo lleno de migas. Hay que joderse. Me van a dar aquí las uvas, limpiando”, la gente ya ni la mira, otros se ríen y hay otros que echan más leña al fuego: -aquí es que son un poco guarros-.
Lola prosigue su trabajo, quejándose: “Que manía tienen de meter la silla debajo de la mesa, con lo que me cuesta sacarla, que luego me duele la espalda, ala incrusta en la mesa, para que no se la lleve nadie. Y que todo el mundo tiene la papelera sucia, no podían echar la basura en una misma papelera, dice con resignación.
Al llegar a la mesa de Rubén, un señor elegante donde los haya y atento con todo el mundo, este hace el amago de levantarse, a lo cual Lola le responde: -No te levantes, que no hace falta como no te puedo tocar los cables, se queda la mesa sin limpiar-, lo dice porque hace un par de días la llamaron la atención porque al estar los cables por el suelo, sin querer los tocaba cuando limpiaba y se iban las conexiones de los equipos.
Otro personaje con el que Lola discute mucho es Isaac, un señor de unos 45 años que no se levanta de la mesa, porque no le gusta que le limpien sus cosas, pero hoy no tiene mas remedio que levantarse por una indisposición. Lola que está muy atenta a todo lo que pasa a su alrededor al darse cuenta de que Isaac se ha levantado, va directa a su mesa y murmurando dice: -Voy a pasarle la mopa a este, que le van a salir hongos-
Esto es un día cualquiera en la vida de Lola. Y es que Lola es una señora un poco peculiar, se queja de su trabajo pero no se mete con nadie.

miércoles, 14 de marzo de 2012

El punto de "no retorno".

Todos sabemos que cuando hablamos de punto de no retorno nos  referimos a una situación en donde los acontecimientos tienen que seguir su cauce, aunque muchas veces no ocurre. Supongamos que llegamos a casa agotados después de una buena comida y nos dejamos caer placidamente en el sofá con la intención de descansar un rato, relajarnos. Poco a poco nuestro cuerpo va creando una sensación de relax, las articulaciones se relajan y entran en un estado de "stand by", es decir estas completamente relajado pero tu cerebro sigue en alerta, escuchando todo lo que pasa a tu alrededor. De pronto tu cerebro deja de funcionar y entra en un profundo estado de sueño, es aquí cuando dices voy a ver si me hecho una siesta. Esto es lo que podríamos denominar como punto de no retorno, en donde ó te duermes ó te levantas del sofá. Tu decides apostar por lo primero. Es en ese momento, en milésimas de segundo cuando alguien inesperadamente te toca y manda al traste todo tu trabajo. Y te preguntas ¿me sirvió de algo?
Por otro lado podemos hablar de nuestra reacción ante este problema: Te cojes un "cabreo" del carajo, con lo bien que estaba yo ú optas por ver que ocurre con serenidad y calma. Esta situación que nos ha ocurrido a mas de uno la podríamos tachar de "cómica" si nos tomamos la vida con filosofía y ya sabemos en este caso como podemos evitar el "punto de no retorno".